martes, 3 de septiembre de 2013

Con más moral que el Alcoyano

Tras el balance final de curso decenas de miles de profesionales docentes quedan asomados al abismo de la incertidumbre. Unos por la precariedad laboral, otros por la obligatoriedad de cambio de destino, muchos por observar la progresiva e imparable degradación de la labor docente, algunos atrapados por los caprichos de la absurdocracia, y casi todos viajando por fuerza en un barco con querencia a trucar las cartas de navegación. En estas entrópicas circunstancias es complicado, y a veces imposible, plantearse cómo mejorar la actividad docente en el curso siguiente.

Algunos afortunados docentes con trabajo estable, que parece que han de realizar penitencia diaria por serlo, prefieren la limitada manera de viajar con pack cerrado, ya sea por comodidad o costumbre. A éstos en parte los comprendo, pues, de vez en cuando, hay que dejarse llevar para no agotarse contracorriente, pero con perspectiva no es satisfactorio ser personaje de las películas de otros y que acaban pasando de moda. Personalmente, como navegante inquieto, me niego a ser tronco a la deriva, pero cansa remar con ganas en un barco de todos con demasiados vigías y turistas expertos en poner la bandera al llegar a tierra.



Gracias al aprendizaje intensivo obtenido estos últimos años como profesor de Formación Profesional de segunda división B (como mi paisano club de fútbol: CD Alcoyano) en el mundo educativo 2.0, he llegado a la conclusión que aquellos docentes que intentan trabajar por objetivos, con transparencia y honestidad, colaborativamente y compartiendo abiertamente, y apoyados en las nuevas tecnologías van por el buen camino

Viñeta dedicada a los profesores y alumnos
que no se rinden fácilmente.
Por ello quiero cuidar especialmente a aquellos compañeros que trabajan con ganas y visión, pues aprender y colaborar juntos es una suerte, y compartir ilusión y motivación es un tesoro. Gracias a los compañeros profesionales del @cipfpfaitanar, a los grandes profesionales de @redfp, al calor de #aulablog13, al fresco de #novadors12, al claustro virtual, a los alumnos que siempre tiran palante, ... y muchos más.


Un curso más me enfrento a la definición de los objetivos del curso siguiente, aprendiendo de los errores y aciertos anteriores, pero con una dificultad cada vez mayor de orientar el trazado de mi desarrollo profesional. Para seguir evolucionando, esa labor de reflexión sincera y planificación tranquila, que antes era privada, va a ser esta vez pública en el siguiente post.